¿Sientes a veces que la marea de cambios tecnológicos te supera?
El constante flujo de innovaciones puede ser abrumador, verdad; pero, ¿y si te dijera que simplificar esto en tres pasos puede ser la clave para mantener tu cordura?
Primero, aceptar que no puedes abarcar todos los cambios. Segundo, enfocarte en lo que te interesa y resulta útil para ti. Y tercero, profundizar un poco en esas áreas que te llaman la atención, como la recolección y análisis de datos.
Este último punto es crucial. Ahora más que nunca, la tecnología nos brinda herramientas poderosas: inteligencia artificial, automatización, ciencia de datos. ¿Por qué es importante en el mundo de la gestión de proyectos? Porque permite tomar decisiones más informadas, fundamentales para el éxito.
Imagina ser un project manager con acceso instantáneo a un reporte claro y confiable, mostrando no solo la situación actual del proyecto, sino también su progreso en la consecución de objetivos de negocio y generación de valor real como rentabilidad, satisfacción de clientes o de empleados. Tener datos confiables, concretos y contundentes realmente puede acortar tu camino hacia decisiones más acertadas.
Pensemos en la estimación del tiempo para considerar entrega de beneficios y resultados en un proyecto. Independientemente del marco de trabajo o herramientas utilizadas, las organizaciones efectivas atesoran datos de esfuerzos similares pasados, permitiendo estimaciones más precisas en tiempo, costos y beneficios. Con las herramientas y datos adecuados, el proceso táctico se acorta, el resultado del proyecto se multiplica y el impacto de engocio puede ser asombroso. ¿Por qué? Porque nos permite enfocar nuestra energía humana en lo realmente importante, automatizando tareas repetitivas.
Claro, acelerar la toma de decisiones basada en datos tiene sus límites. Cada proyecto es único, y confiar ciegamente en los datos puede llevar a fracasos y errores contundentes. Por eso, es un proceso de cambio paulatino donde se combina la aportación humana con las sugerencias automatizadas, encontrando un equilibrio perfecto.
La toma de decisiones en proyectos, basada en procesos que generan datos confiables, utilizando herramientas para utomatizar es el único camino para ser competitivo. Pero nunca, o al menos no pronto, podría reemplazar el juicio estratégico y astuto de un líder.
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